¿Sabíais que según Wikipedia sólomente hay un 13% de población zurda en el mundo para varones y en mujeres es nada más que un 9%. ?
La verdad es que he descubierto un mundo desconocido hasta ahora, no somos en absoluto conscientes de la utilidad que tiene nuestra mano digamos principal. Llevo tres semanas con mi mano izquierda y ha sido todo un ejercicio de reeducación, en mi caso al menos la mano izquierda era una autentica nulidad. No controlas los movimientos que con la mano derecha son tan precisos..
Hay tantísimas cosas que no puede con una sola mano en las que nunca había pensado, desde no poder hacer café por la mañana hasta cuestiones cotidianas de higiene personal. ¿Habéis probado alguna vez a lavaros los dientes con la izquierda? La energía se vuelve incontrolada, los movimientos torpes y las encías sufren golpes gratuitos en una operación de lo más complicada.
Cortar un filete o untar una tostada es misión imposible, en estas tres semanas aunque el entrenamiento está trayendo sus frutos, he llegado incluso a romper un cuchillo cuando intentaba cortar salchichón. Barrer, fregar, firmar un recibo de la tarjeta de crédito, o ponerte unas medias, abrocharte unos vaqueros o atarte los cordones se convierten en retos que vas venciendo día a día. Por no hablar de la higiene personal en la que lavarte el pelo convierte el baño en un bebedero de patos, maquillarte o plancharte el pelo son dignos ejercicios de malabarismo sin mencionar cuestiones más escatológicas en las que supongo ya estáis pensando.
Así que como de todas las situaciones hay que sacar una lectura positiva esta será la mía, deberíamos prestar más atención a esa ‘otra’ mano que solo usamos de comodín para ayudar a la derecha. Y aunque se dice que una persona necesitaría al menos 6 meses para llegar a utilizar la ‘otra’ mano de manera regular ante la adversidad uno se crece y a todo se acostumbra.
Comentarios
Publicar un comentario